Detalle de ;El martirio de San Mauricio. MUERTO el Greco, acabados sus tribulaciones terrenas, los pleitos, las arbitrariedades de los clientes poderosos, quedó su gigantesca obra. Al estudiar su vida, vimos que resultaba imposible separarla de su producción artística. Sus cuadros habían sido su verdadero modo de ser. Su obra está suficientemente presente, a la vista de cualquier buen espectador, como para insistir en su memoria. Por el contrario, los caminos abiertos por este solitario y la influencia que su obra y su estilo ejercieron en el desarrollo de la pintura seguirán siendo un tema inagotable de meditación. En efecto, resultaría incorrecto hablar de una «escuela del Greco», por cuanto sólo ayudaban Francisco Preboste, Jorge Manuel y Luis Tristán, en quien muchos han querido ver a su discípulo predilecto. Pero el calificativo de discípulo otorgado a estos auxiliares es un tanto incorrecto, si tenemos en cuenta que se limitaron a tareas de verdaderos ayudantes. La...